En Jomipsa nos charlan delpouchque ofreceun sistema de calentamiento de comida químico sin fuego. “Todos los menús son mejorables, incluso en los hospitales, donde son muy mejorables. La clave, que jamás es simple, es hallar un punto medio entre la palatabilidad del menú, su sostenibilidad económica, la salud y la adecuación a los objetivos de la persona”, repasa Bandera. Además, empleamos un sistema de cabinas independientes y recluidas del resto que nos deja asegurar la integridad y el sabor de cada alimento.
Detalle histórico, «antes la ración italiana llevaba una botellita de licor y la de españa cigarrillos». Afirman los militares que la ración de los alemanes es de «alta calidad y alto poder calórico» y la comida se presenta en papel de aluminio. Disponen de 24 menús y, dicen los españoles, «todo parece de teconología espacial. Pero son calorías envasadas, lo de menos es el gusto o el gusto.Todo termina sabiendo igual». El ejército español especificó en 1995 la incorporación de nuevos menús con un sello “halal” (comida militar de españa sin cerdo), que incluía atún con tomate, ensalada de alubias o embutidos sin cerdo. “Lo normal es que siempre y en todo momento llevemos algo con nosotros cuando nos encontramos en la zona de combate, pues la fuente de abastecimiento está lejos”.
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En Jomipsa nos afirman que setestean los platosy hay interés continuo en la satisfacción del usuario final. “Se hacen catas y rectificaciones de recetas y sabores todo el tiempo. En un caso así, el Ejército de Tierra, traslada al Ministerio de Defensa el feedback del usuario sobre las comidas. Estemenúllevasopa de pollo y pasta, lentejas con chorizo, caballa en conserva y dulce de manzana. Es muy entretenido ver de qué manera nos encaramos a una gastronomía que no conocemos en el momento en que absolutamente nadie nos enseña de qué manera prepararla o cómo tomarla.
Por poner un ejemplo, en Bosnia, se especificó la disposición para usados de ascendencia musulmana. Algunos menús, explican los militares, tienen más éxito que otros, como las salchichas en la cena o las lentejas en la comida. «Comunmente cuando nos encontramos de maniobras lo que la gente busca es algo caliente» , de ahí que todas y cada una de las cenas tienen sopa de verduras y las comidas, de pollo. En verano, el menú de ensalada de atún con vegetales es el que triunfa.
Curiosidades Cocina Bestial!
Hay cocido madrileño, judías con chorizo, calamares en su tinta, fabada, albóndigas, judías verdes con jamón, carne en salsa, mejillones… Todo cuanto podríamos encontrarnos en un menú del día de una ciudad de españa alguno. Varios de los platos que puede hallarse un soldado en las raciones de combate. En el laboratorio del PCAMI someten cada cierto tiempo a las raciones a controles internos. Se ponen las latas a 35º y 55º para estudiar si crecen microorganismos y observar que no haya fugas. Las porciones deben soportar por igual en los Países Bálticos o en Mali, por refererir 2 países en los que, en la actualidad, hay desplegados efectivos del Ejército español.
Por ejemplo, la ración militar que frecuenta tener distintas caducidades en un mismo pack son las porciones MRE. Si bien varias personas dedicadas al planeta survival, han probado estas raciones militares caducadas de hace una década, exponiendo que platos están permitidos y que platos no deberían comerse tras su caducidad, si bien no lo recomiendan. Las Raciones Individuales de Combate no son el único modelo de nutrición tambien tiene raciones de emergencia envasadas al vacío y en caja metálica que dan 1,050 calorías cubriendo asi las necesidades de básicas en ocasiones de urgencia. Las Fuerzas de Guerra Naval Particular tienen menús de comida afines a los usados en Estados con bolsas coche-calentables. Y por ultimo los militares tienen porciones de refuerzo con un plus de calorías.
Comentarios En “comida Militar Española”
Las citadas bolsas de calentamiento también son un avance considerable. Como enseña a DAP el teniente coronel José Antonio Álvarez Gómez, jefe de la Unidad de Estudios, Proyectos y Laboratorio del PCAMI, el diseño de las porciones tiene presente, en primer lugar, las necesidades nutricionales de los combatientes. Estas vienen dadas por una normativa de la OTAN que establece que se tienen que sugerir 3.600 calorías cada día, mucho más una ración de refuerzo caso de que la exigencia física de la misión sea en especial alta de otras 1.000 calorías.
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Además de esto, es unasopa de sobre, por lo que tiene elsabor artificial y subido de salpropio de este tipo de alimentos. Mucho más equilibradas de sal, con unolor y sabor bastante casero, caldo espeso y legumbres agradables y mantecosas. De los 10 menús A y B, dice que lo que más éxito tiene sonlos callos, la carne guisada y las “salchichitas con tomate”.“Las salchichitas, si bien es una comida mucho más fácil, tienen buen gusto y además de esto son rápidas de comer, algo que frecuentemente se agradece”.
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